5
REGRESARÁ EL
INVIERNO
Regresará el
invierno
y la piel
bronceada caerá al suelo salpicando los zapatos
[del
amor de verano.
La nieve tintará
de blanco estas venas todavía rojas.
Regresará el
invierno,
quizá en abril,
quizá en julio.
Me llevará lejos:
donde el iglú y el
león sin melena.
Me dejará los
dedos inservibles, incapaces de llamar a un
[timbre
para preguntar por ti.
Me dejará inmóvil
en el segundo cajón del congelador,
al lado de la
pechuga de pollo, el arroz tres delicias
[precocinado
y los cubitos de
hielo que ya no usaremos para enfriar
[nuestra
sangría.
Regresará el
invierno
y las lágrimas
heladas me romperán los ojos.
Se solidificará el
río,
y estos remos ya
destrozados por la boca de tu tiburón
quedarán
atrapados.
Quedará estancada
mi barca
y mi grito.
Los cielos se
volverán negros como pupilas dilatadas,
la margarita del
sí se marchitará.
Me
mirarás desde la ventana de tu salón con chimenea
y
taparás los ojos a tus curiosos hijos
para
que no vean cómo este lagarto sin roca caliente al sol
falla
en el intento de recuperar
lo
que es suyo.
4
SÍ.
A todo.
Sí a la cabaña que
imaginamos la noche en que nos
[dimos cuenta de que
en esta ciudad hay
más escaparates
que almas
Sí a las miradas
que abren puertas.
Sí a la música que
acompaña a las persecuciones en las películas.
Sí a nuestra fuga.
Sí a los besos
pares e impares.
Sí a compartir
montaña y eco.
Sí a que digas sí
cuando te pregunte si vas a atreverte conmigo.
3
BIENVENIDO.
Puedes venir
siempre que quieras, toma las llaves.
No, mejor dejo la
puerta abierta.
¡O la quito!, sí,
quito la puerta, dejo el felpudo y el cascabel
[que
suena con el viento.
Me deshago también
de las persianas,
de las hojas de
las ventanas,
y de la cortina de
la ducha.
Puedes venir
siempre que quieras, no escondo nada.
Que pase el aire y
tu risa,
tu aroma, tu oído,
tu sabor a menta.
Puedes venir
siempre que quieras;
me quito los
párpados,
destapo los
bolígrafos,
abro los cajones
de la cocina.
Ya no hay
secretos;
me arranco la
piel,
vomito las
mariposas para que te lo cuenten todo.
Puedes venir
siempre que quieras
quedarte.
2
VISITA
Ven a verme,
salta la hoguera,
sé ave,
atraviesa el
bosque hasta llegar a las vías.
el tren pasa a las
22:15,
súbete,
llama a mi puerta,
sonríe como
aquella vez que me pediste que me quedara,
sonreiré
pidiéndote que te quedes.
1
LOS
RELOJES
Estamos aquí, yo
en mi aquí y tú en el tuyo; cada uno en
[su
cenicero.
Separados como el
rico del pobre.
Lejanos como la
primera palabra.
Dime que todavía
te acuerdas,
que de vez en
cuando piensas en mí y se te ponen rojitas
[las
orejas
como a
Extrechinato sonando en domingo.
Hazme saber que
algún que otro día llueve aunque no
[llueva
y miras fijamente
la pared
y se dibuja mis
ojos en ella.
Y llenas la luna
con mis fotografías.
Y no hay forma de
librarse del frío.
¿Sigue abierta la
papelería de Evaristo?
¿Todavía ponen el
mercado en la misma plaza?
No sé cuánto
tiempo ha pasado.
Tal vez un año,
quizá fue el
miércoles de la semana pasada;
qué poco sentido
tienen las horas,
qué innecesarios
son los relojes ahora que habitamos en
[presentes distintos.
Dime
que la culpa no es de ninguno,
que
quisimos pero no pudimos
porque
en la vida real casi nunca se puede.
Aunque
se quiera,
aunque
te quiera.
LA BARBA DE PETER PAN ES UN POEMARIO QUE SUPUSO EN MÍ UN GRAN DESCUBRIMIENTO. ME ENCANTA CÓMO LA AUTORA PLASMA EN SUS LÍNEAS TODOS ESOS SENTIMIENTOS QUE TIENE EN SU INTERIOR. ES SIN DUDA UN LIBRO AL QUE RECURRO CONSTANTEMENTE.
¡Hola! Vengo de la iniciativa #BloggerUnidos
ResponderEliminarMe ha gustado mucho esta corta pero agradable entrada, honestamente me han dado ganas de leerlo, me gustó mucho el poema número cuatro (Si) y el número dos (Visita).
¡Nos leemos!